Honduras en vilo: persiste la incertidumbre electoral y crece la tensión política

A más de dos semanas de las elecciones generales del 30 de noviembre, Honduras aún no conoce sus resultados oficiales. La demora en el escrutinio, las denuncias de fraude, las presiones sobre el Consejo Nacional Electoral y la advertencia de la presidenta Xiomara Castro sobre un presunto intento de golpe profundizan un clima de incertidumbre política e institucional en el país centroamericano.

Elecciones sin resultados y un país expectante

Honduras continúa sin conocer quién será su próximo presidente. Las elecciones generales celebradas el pasado 30 de noviembre se desarrollaron de forma pacífica y con una participación masiva, según coincidieron observadores nacionales e internacionales. Sin embargo, los resultados oficiales aún no han sido proclamados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que tiene plazo legal hasta el 30 de diciembre para hacerlo.
A dos semanas de esa fecha límite, la falta de definiciones mantiene en vilo a la ciudadanía y eleva la tensión política, en un contexto marcado por acusaciones cruzadas, denuncias de fraude y movilizaciones en las calles.

Los obstáculos que frenan el escrutinio

El CNE atribuyó la demora a una serie de dificultades administrativas, tecnológicas y políticas. En particular, resta resolver el escrutinio especial de al menos 2.792 actas electorales que presentan inconsistencias y cuyo conteo debía comenzar el sábado pasado.
Entre los problemas señalados se encuentran la ausencia de representantes de algunos partidos en las mesas de verificación, procesos tecnológicos aún pendientes y un clima de presión política que afecta directamente al organismo electoral.
Para este escrutinio especial se habilitaron al menos 150 mesas, integradas por representantes del CNE, delegados de los cinco partidos que participaron en la contienda, fiscales, auditorías y observadores nacionales e internacionales. El conteo se realizará en dos turnos de doce horas y, según estimaciones de exconsejeros del ente electoral y dirigentes de la oposición, podría extenderse entre cuatro y cinco días.

Denuncias, amenazas y un proceso bajo presión

La situación se agravó en los últimos días por las denuncias de hostigamiento, presiones y amenazas contra dos de los tres consejeros del CNE: su presidenta, Ana Paola Hall, representante del Partido Liberal, y Cossette López, delegada del Partido Nacional. Ambas advirtieron públicamente que el proceso electoral está en riesgo, al igual que su integridad física.
Tanto el Partido Liberal como el Partido Nacional —ambos de orientación conservadora— figuran como los más votados en los resultados preliminares difundidos hasta el momento, lo que añade un componente político sensible a la crisis del organismo electoral.

Libre denuncia fraude y convoca a movilizaciones

En paralelo, el gobernante Partido Libertad y Refundación (Libre) rechazó reconocer los resultados preliminares de las elecciones presidenciales, al alegar que existió fraude en perjuicio de su candidata, Rixi Moncada. Desde el lunes, el oficialismo comenzó a convocar movilizaciones en distintas ciudades del país para exigir un conteo “voto por voto”.
Las protestas, según insistieron los dirigentes oficialistas, se desarrollan de manera pacífica, aunque contribuyen a un clima de creciente polarización social y política.

Xiomara Castro advierte sobre un presunto “golpe”

En medio de este escenario, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, denunció este martes la existencia de un presunto intento de golpe contra su Gobierno. Además, señaló que el expresidente Juan Orlando Hernández estaría planificando su regreso al país para proclamar al ganador de las elecciones, lo que añadió un nuevo elemento de tensión al proceso.
Las declaraciones de la mandataria encendieron alarmas tanto dentro como fuera del país, en un contexto donde la institucionalidad democrática aparece bajo fuerte presión.

Zelaya y las Fuerzas Armadas fijan posición

El coordinador general de Libre y expresidente de Honduras, Manuel Zelaya —esposo y principal asesor de Castro— reiteró su llamado a la militancia a movilizarse de forma pacífica en respaldo al Gobierno. “Las movilizaciones serán pacíficas y en respaldo a Xiomara Castro. Golpe de Estado nunca más, no al golpe electoral”, expresó a través de la red social X.
Por su parte, el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Roosevelt Hernández, buscó llevar tranquilidad al afirmar que “aquí no va a haber ningún golpe”. En ese sentido, aseguró que los militares garantizarán la estabilidad del país y la permanencia del actual gobierno hasta el 27 de enero de 2026, fecha prevista para la alternancia constitucional.

Resultados preliminares y un final abierto

De acuerdo con los datos preliminares del CNE, con el 99,80 % de las actas escrutadas, el candidato del Partido Nacional, Nasry “Tito” Asfura, encabeza la votación con el 40,54 % de los sufragios. En segundo lugar se ubica Salvador Nasralla, del Partido Liberal, con el 39,19 %, mientras que la candidata oficialista Rixi Moncada aparece en tercer lugar con el 19,29 %.
Pese a estas cifras, la falta de resultados oficiales y las denuncias de irregularidades mantienen abierto un escenario de alta incertidumbre. Honduras enfrenta así horas decisivas, en las que el desenlace electoral y la estabilidad democrática dependen del avance del escrutinio y de la capacidad de las instituciones para garantizar transparencia y confianza en el proceso.