Con el 100% de los votos procesados en el escrutinio primario por la Corte Electoral, los resultados confirmaron que la fórmula frenteamplista liderada por Yamandú Orsi y Carolina Cosse alcanzó la presidencia de Uruguay, superando a Álvaro Delgado y Valeria Ripoll, del Partido Nacional, por una diferencia de 95.428 votos. Este triunfo marca el regreso del Frente Amplio al poder nacional a partir del 1° de marzo de 2025.

Montevideo y Canelones: los pilares del triunfo

Montevideo y Canelones fueron clave para la victoria. En la capital, el Frente Amplio obtuvo 504.562 votos, una ventaja de casi 150.000 sufragios frente al Partido Nacional, que alcanzó 357.380. En tanto, en Canelones, la coalición de izquierda logró 208.020 apoyos contra los 160.454 de los blancos, consolidando otra diferencia significativa de más de 47.000 votos.

Estos dos departamentos, bastiones históricos del Frente Amplio, aportaron una diferencia combinada de casi 200.000 votos, suficiente para neutralizar el dominio del Partido Nacional en gran parte del interior del país.

Resultados por departamento

El Partido Nacional ganó en 14 departamentos, destacándose Rivera, donde obtuvo su mayor ventaja: 19.000 votos más que el Frente Amplio. Sin embargo, en Salto, Paysandú y San José la contienda fue reñida, con victorias parciales del Frente Amplio.

• Artigas y Rivera: Aquí los blancos dominaron cómodamente. En Artigas, la diferencia fue de más de 7.000 votos, mientras que en Rivera, la ventaja superó los 19.000.

• Salto, Paysandú y San José: La disputa fue cerrada. En Salto y Paysandú, las diferencias fueron menores a 2.000 votos a favor del Frente Amplio, con observados aún por contabilizar. En San José, la ventaja de 676 votos también se mantiene pendiente de los votos observados.

• Colonia y Soriano: Ambos departamentos quedaron en manos del Partido Nacional, con diferencias que oscilan entre 1.500 y 8.000 votos.

Interior del país: dominio blanco

El Partido Nacional consolidó su predominio en la mayoría de los departamentos del interior, destacando Florida, Flores, Lavalleja y Durazno, donde las diferencias fueron amplias y los votos observados no tienen capacidad de revertir los resultados.

En Maldonado, Rocha, Cerro Largo, Tacuarembó y Treinta y Tres, la coalición republicana mantuvo ventajas significativas, aunque con menor margen que en sus bastiones tradicionales.

Un mapa dividido

El análisis del escrutinio evidencia un país políticamente dividido entre Montevideo-Canelones, baluartes frenteamplistas, y el resto del territorio, donde el Partido Nacional es predominante. Esta configuración se refleja en las cifras: aunque el Frente Amplio obtuvo menos departamentos, la superioridad numérica en sus bastiones urbanos fue determinante.

+datos

El regreso del Frente Amplio al gobierno nacional marca un nuevo capítulo en la historia política del país, con Yamandú Orsi y Carolina Cosse al frente. Mientras el Partido Nacional exhibió su fortaleza en el interior, la coalición de izquierda capitalizó su dominio en las principales ciudades. Los resultados también evidencian desafíos para el nuevo gobierno, que deberá gestionar un Uruguay políticamente polarizado y atender las expectativas de un electorado diverso.