Marie Fredriksson: la voz que sigue conmoviendo al mundo en un nuevo aniversario de su partida

El 9 de diciembre continúa siendo una fecha cargada de emoción para millones de fans de Roxette alrededor del mundo. Es el día en que se recuerda a Marie Fredriksson, la inconfundible voz sueca que dejó una marca imborrable en la historia del pop internacional. Aunque la artista falleció en 2019, su presencia permanece intacta en la memoria colectiva, en las plataformas musicales y en radios como Antena 1, donde clásicos como Listen to Your Heart, It Must Have Been Love y Fading Like a Flower siguen despertando emociones de varias generaciones.

Este aniversario no es solamente una conmemoración. También es una celebración: la celebración de una artista irrepetible, de una obra que trascendió fronteras y de un legado que continúa expandiéndose incluso hoy, mientras Roxette atraviesa una nueva etapa en los escenarios.

Los orígenes de una estrella: la vida de Marie antes de Roxette

Mucho antes de conquistar el mundo, Marie Fredriksson era una joven del sur de Suecia criada en un ambiente de austeridad, pero también de música. Su camino artístico comenzó en bandas locales, luego en el grupo punk Strul y posteriormente en el dúo MaMas Barn, donde su potente voz empezó a llamar la atención de la industria nacional.

Su carrera solista se consolidó en la década del 80 con álbumes como Het vind (1984) y Efter stormen (1987), que la posicionaron como una de las voces más destacadas de la escena sueca y le valieron premios y reconocimiento. Ese recorrido fue el preludio perfecto para su encuentro artístico con Per Gessle, el momento que cambiaría para siempre su vida… y la historia del pop europeo.

El nacimiento de un fenómeno global: Roxette

Cuando Marie Fredriksson y Per Gessle unieron fuerzas a mediados de los 80, lo hicieron con un objetivo modesto: llevar el pop sueco a un público internacional. Lo que ocurrió superó cualquier expectativa.

El álbum Look Sharp! (1988) catapultó a Roxette a la fama mundial gracias a éxitos como The Look y Listen to Your Heart, ambos número uno en el ranking Billboard. A partir de allí, la popularidad del dúo se disparó.

It Must Have Been Love, incluida en la banda sonora de Pretty Woman, se convirtió en un himno global, mientras que Joyride (1991) expandió aún más su alcance internacional y llevó al grupo a realizar giras multitudinarias, con públicos que superaban el millón de personas.

La voz de Marie, capaz de transitar entre la sensibilidad y la fuerza con naturalidad absoluta, fue siempre el corazón emocional del proyecto. Su interpretación convirtió cada canción en una experiencia íntima para los oyentes, algo que aún hoy la mantiene vigente.

La batalla más difícil y el retorno a los escenarios

En 2002, Marie fue diagnosticada con un tumor cerebral, un golpe devastador para ella y para sus seguidores. Tras someterse a una cirugía y extensos tratamientos, su recuperación fue lenta y desafiante. Sin embargo, en 2004 sorprendió al mundo con The Change, un álbum profundamente personal que marcó su renacimiento artístico.

A partir de 2009, Marie regresó a Roxette y emprendió junto a Gessle la extensa gira mundial Neverending Tour, que se prolongó hasta 2016. A pesar de sus limitaciones físicas, cada presentación estuvo cargada de emoción y gratitud, demostrando la resiliencia y la autenticidad que siempre definieron su carrera.

La despedida y un legado que sigue iluminando

Marie Fredriksson falleció el 9 de diciembre de 2019, a los 61 años. Sus fans en todo el planeta, junto a artistas y medios internacionales, rindieron homenaje a su impacto y a la sensibilidad única de su voz.

Sin embargo, como ocurre con los grandes artistas, su obra continúa viva. En radios dedicadas a la música adulta contemporánea, sus interpretaciones siguen ocupando un lugar especial. Para quienes crecieron con Roxette, Marie continúa siendo una presencia cotidiana, un recuerdo vibrante que trasciende generaciones.

Una nueva etapa: el regreso de Roxette a los escenarios

Tras la muerte de Marie, Per Gessle pasó por un proceso de reflexión sobre el futuro del proyecto. Nació primero el proyecto PG Roxette, y más tarde, en 2024, se anunció oficialmente el regreso del nombre Roxette a los escenarios, esta vez con la voz de la reconocida artista sueca Lena Philipsson.

La idea, según Gessle, no es reemplazar a Marie, sino mantener vivo el repertorio que construyeron juntos. Con elegancia, respeto y un estilo propio, Lena interpreta los clásicos del dúo sin imitaciones, preservando la esencia original mientras aporta su identidad.

La gira Roxette In Concert 2025 recorre actualmente Europa, África y Oceanía con excelente recepción. En 2026, el tour Live – Back Again llegará a Brasil con shows programados en Río de Janeiro (12 de abril) y São Paulo (14 de abril), un reencuentro esperado por los fanáticos sudamericanos.

¿Quién es Lena Philipsson?

Lena Philipsson es una figura emblemática del pop sueco. Con una carrera iniciada en los años 80, múltiples éxitos radiales y participaciones destacadas en el Melodifestivalen, es una artista versátil, carismática y de fuerte presencia escénica.

En 2004 obtuvo notoriedad internacional con It Hurts, logrando uno de los mejores resultados de Suecia en la historia moderna del festival. Su voz —clara, firme y expresiva— encaja naturalmente en el repertorio de Roxette, aportando un equilibrio entre respeto al legado y autenticidad interpretativa.

Por qué Marie Fredriksson sigue tan presente

Marie permanece en el corazón del público porque su forma de cantar encapsulaba aquello que hace que la música sea indispensable: emoción genuina, vulnerabilidad, intensidad y verdad. Su voz no sólo interpretaba canciones; les daba vida.

Por eso, cada aniversario de su partida no es solo un recordatorio de lo que perdimos, sino también de lo que sigue con nosotros:
un legado inmenso, una obra que no se desvanece y una artista cuyo impacto atraviesa generaciones.

Marie vive en las canciones que siguen acompañando al mundo, y en el impulso que mantiene a Roxette en los escenarios casi cuatro décadas después.