Primero lo primero
“Lo esencial es invisible a los ojos” De “El principito” de Sain-Exupéry
Opinión29/01/2024 Dr. Ricardo CastelliPor dónde empezamos?... Nos decía Shakespeare: “Ser o no ser, he aquí el problema” o más atrás: Sócrates, o Aristóteles…, el desafío de siempre: conócete a ti mismo.
No!, vamos más atrás, primero lo primero: comencemos por lo básico: la naturaleza. Somos parte de ese todo que es la naturaleza: la Pacha Mama. Qué es lo primero que nos enseña?..., por donde iniciar esta reflexión?, en el Génesis, en la Biblia? No, vamos más atrás, a lo más simple, a los cinco elementos que el hombre reconoce desde el inicio de todos los tiempos: Madera. Fuego. Tierra. Metal. Agua. (500 años a.c.)
De esto tan primario, agreguemos nuestra evolución del conocimiento, lo que nos ha agregado las ciencias químicas. Estas nos muestran otra forma de mirar lo mismo (Siglo xx). Hoy sabemos que cada uno de estos elementos está compuesto por partículas (átomos), los que combinados de forma apropiada le dan una estructura propia, un carácter particular a cada uno de estos elementos. Luego la física le da otro toque a la estructura de cada elemento: un “alma”, una esencia, algo que las distingue, pero también invisible a los ojos: la energía, y esa energía en biología: es vida!.
Entonces la ciencia ha encontrado que tanto la materia inerte como la viva es producto de la combinación de átomos… Elementos minúsculos que siempre están es movimiento, invisibles a los ojos, pero que en conjunto determinan esa fuerza propia, esencial, fundamental al proceso evolutivo del Universo, de la Tierra, y de la vida como la llamamos en biología. El misterio de Dios como lo llaman los creyentes.
Los seres vivos, entre los cuales, obviamente, nos incluimos, somos el resultado de las combinaciones de estas estructuras más sencillas (átomos) que componen órganos y sistemas que nos mantienen vivos. Para hacer más linda y compleja la idea, debemos decir que, el Universo todo está compuesto por estas estructuras más sencillas, que todo está compuesto de átomos y una hermosa verdad para pensar: acaso no somos todos parte de eso, navegando en el espacio, en una nave que llamamos Tierra?.
“Metafísico estáis…” dijo Babieca. “Es que no como” respondió Rocinante…
“El ser humano está condenado a ser libre”, dijo Sartre finalizada la Segunda Guerra Mundial. Parecía una paradoja, un juego de palabras, sin embargo es mucho más que eso, es un llamado a todos, a ser responsables del mundo que elegimos, a ocuparnos del país que construyo, a ser responsables de la guerra y del exterminio que lleva.
Nosotros no escapamos a las reglas generales de la naturaleza y de la barbarie. Somos el ser vivo más complejo y completo del paneta. Los mayores generadores de cambios que son productos de nuestra inteligencia y de nuestras potencialidades (para bien y para mal). Como me decía la abuela: “si te gusta la chancha, tenés que hacerte cargo de los chanchitos”
Vivimos en una sociedad con crecimiento veloz, que ha globalizado el consumo, que determina reglas de mercado y genera conductas alteradas. El personaje que la representa tiene cada vez más reacciones violentas, contra sí, en familia y el entorno. Genera una tendencia a la glorificación personal, al desplante soberbio, a la ambición obsesiva, al exhibicionismo, con una loca avidez por el dinero y/o el poder. Mantiene una suficiencia desbordante, no escucha, es un indolente, impermeable a toda lógica. No reconoce sus errores, ni aprende de ellos, y los repite una y otra vez. Generamos un ególatra, envidioso, que solo vive por el dinero y para el dinero.
Qué posibilidades tenemos nosotros de cambiar esto?... Lo que el hombre ha construido, el hombre puede cambiarlo. Pero primero necesita ocuparse de él mismo. Sabemos de ese personaje que siente el vacío, que quiere cambiar y no sabe cómo hacerlo… Busquemos un perfil más solidario, más atento y cuidadoso del hombre que somos y poco a poco llegaremos al país que queremos.
La vida nos marca dos vías paralelas entre las cuales transcurre nuestro diario vivir. Una a la derecha y la otra a la izquierda. Se insiste en hacernos creer que la verdad es una u otra. La medicina nos muestra que tenemos dos cerebros, uno derecho y otro izquierdo, cada uno tiene su perfil de funciones similares y diferentes, pero funcionan integrados, asociados. Eso es lo que nos hace más inteligentes. La madre naturaleza nos enseña así lo trascendente de actuar integrados. No mezclados. Integrados!.
Este es un año electoral: valoremos el país que tenemos, pensemos en el país que necesitamos, ocupémonos de los temas de estado.
Vamos por más!! Todos con todos!. Juntos se puede!!